El tratamiento con acupuntura consiste en la aplicación de finas agujas en determinadas puntos de la piel con el fin de activar o regular los recursos energéticos del organismo. Esta estimulación genera un efecto curativo en el plano físico y químico del cuerpo lo que reequilibra las funciones biológicas alteradas.

Los fundamentos de la acupuntura tienen su origen en la concepción vitalista y holística de la Medicina Tradicional China la cual considera al ser humano una réplica en miniatura del orden natural del universo y por tanto sujeto a las mismas leyes y principios.

El elemento clave utilizado en la terapia con acupuntura es el conocimiento de los canales de energía sutil que recorren el cuerpo en un circuito de movimiento constante que alimenta y revitaliza todos los órganos y tejidos normalizando su funcionalidad.

El nivel de bloqueo y deficiencia de dichos canales determina la intensidad de los síntomas físicos o psíquicos acompañantes a cualquier trastorno o enfermedad.

Pueden tratarse con esta técnica casi todo tipo de patologías pero está especialmente indicada en problemas crónicos reacios a los tratamientos convencionales, adicciones, paliativo del dolor, estados de ansiedad, insomnio, cefaleas funcionales, vértigos y mareos, trastornos respiratorios, alergias, desajustes menstruales, fatiga muscular, etc...